Top 5 de las obras más icónicas del arte cinético – Claudio Antonio Ramirez Soto

Claudio Antonio Ramirez Soto

El arte cinético es un estilo artístico que se caracteriza por el uso del movimiento y la percepción visual para crear obras que parecen estar en constante cambio como el arte de Soto. Este estilo se originó en la década de 1950 y ha evolucionado a lo largo del tiempo, dejando atrás algunas de las obras más icónicas del movimiento. En este artículo, Claudio Antonio Ramirez Soto nos invita a explorar el top 5 de las obras más icónicas del arte cinético y su importancia en la historia del arte.

Fuente: https://fineartamerica.com/featured/the-stravinsky-fountain-david-thompson.html

Conoce el Top 5 por Claudio Antonio Ramirez Soto

  1. La Fuente Stravinsky – Jean Tinguely y Niki de Saint Phalle

La Fuente Stravinsky es una obra de arte cinético ubicada en París, Francia. Fue creada por los artistas Jean Tinguely y Niki de Saint Phalle en 1983. La fuente cuenta con una serie de esculturas que representan diferentes instrumentos musicales, que se mueven y generan agua en diferentes patrones. La obra es un homenaje al compositor Igor Stravinsky y se ha convertido en un icono de la ciudad de París; resaltó Claudio Antonio Ramirez.

Fuente: https://www.google.com/url?sa=i&url=https%3A%2F%2Fjapanobjects.com%2Ffeatures%2Fyayoi-kusama-world&psig=AOvVaw1Lfaq-WvZStnIE35J4n5zu&ust=1680648560213000&source=images&cd=vfe&ved=0CBEQjhxqFwoTCKD1tPfljv4CFQAAAAAdAAAAABAH

  • La Escultura de los Vientos – Yayoi Kusama

La Escultura de los Vientos es una obra de arte cinético creada por la artista Yayoi Kusama. La obra está ubicada en el centro comercial Beverly Center en Los Ángeles, California. La escultura cuenta con una serie de esferas móviles que se mueven con el viento, creando un efecto visual hipnótico. Según Ramirez Soto la obra es una de las más emblemáticas del arte cinético y ha sido exhibida en museos de todo el mundo.

Fuente: http://oldenburgvanbruggen.com/largescaleprojects/TEMPLATE-LSP.htm

  • La Torre de Agua – Claes Oldenburg y Coosje van Bruggen

La Torre de Agua es una obra de arte cinético ubicada en Yonkers, Nueva York. Fue creada por los artistas Claes Oldenburg y Coosje van Bruggen en 1992. La obra cuenta con una estructura de acero inoxidable que simula una torre de agua, con una serie de tuberías que se mueven gracias a la fuerza del viento. La obra es una de las más icónicas del arte cinético y ha sido exhibida en varios museos del mundo.

  • La Esfera Armilar – Paul Matisse

La Esfera Armilar es una obra de arte cinético creada por el artista Paul Matisse. La obra está ubicada en la entrada del edificio de la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos. La esfera cuenta con una serie de anillos móviles que giran sobre sí mismos, creando diferentes patrones y efectos visuales. La obra es otra de las más emblemáticas del arte cinético y ha sido exhibida en varios museos del mundo; comentó Claudio Antonio.

  • El Reloj de Sol – Santiago Calatrava

El Reloj de Sol es una obra de arte cinético ubicada en la estación de tren de Santiago de Compostela, en España. Fue creada por el arquitecto y artista Santiago Calatrava en 1993. La obra cuenta con una estructura metálica que simula las hojas de un reloj de sol, con una serie de elementos móviles que se mueven con el viento.

El arte cinético es un estilo artístico fascinante que ha dejado atrás algunas de las obras más icónicas en la historia del arte. En este artículo, hemos explorado el top 5 de las obras más emblemáticas del movimiento, desde la Fuente Stravinsky hasta El Reloj de Sol de Santiago Calatrava. Cada una de estas obras ha dejado una huella imborrable en la historia del arte y ha inspirado a generaciones de artistas en todo el mundo.

Referencias:

  1. «La Fuente Stravinsky». Centre Pompidou. https://www.centrepompidou.fr/es/programa/agenda/evento/cbdDyj
  2. «La Escultura de los Vientos de Yayoi Kusama». Beverly Center. https://www.beverlycenter.com/en/blog/news/the-wind-sculpture-by-yayoi-kusama-2680805.html
  3. «La Torre de Agua de Claes Oldenburg y Coosje van Bruggen». The New York Times. https://www.nytimes.com/1992/07/26/arts/art-view-oldenburg-and-van-brugg

Cinetismo Urbano en espacio público caraqueño por Claudio Ramírez

Claudio Ramirez Soto

El cinetismo urbano es una expresión artística contemporánea que se ha desarrollado en el espacio público caraqueño desde la década de 1950 hasta el año 2000. [1] [2] [3]. El arte cinético asume el movimiento como parte de la experiencia de apropiación, ya sea desde la simulación del movimiento o de la necesaria participación de quien lo percibe al invitarlo a percibirlo desde distintos ángulos.[3] Claudio Antonio Ramírez Soto comenta, la experiencia del arte cinético venezolano, específicamente en la ciudad de Caracas, ha tenido una estrecha relación con la arquitectura y el espacio público, además, un artículo académico de Cruz Armando Criollo Aliendres, arquitecto de la Universidad Simón Bolívar, indica que el cinetismo urbano caraqueño se ha desarrollado en las últimas décadas. [3]

Fuente: https://eldiario.com/2020/08/25/jesus-soto-obras-arte-cinetico-venezolano/

En muchos espacios públicos caraqueños, las expresiones artísticas como esculturas y murales dominan la silueta urbana y las relaciones que los ciudadanos realizan en estos lugares. [1] La apropiación del espacio público caraqueño está influenciada por la presencia del arte en su configuración debido al importante número de obras colocadas en el espacio abierto. [1]

Además, existe un vínculo entre el concepto de arte con el medio físico y su impacto en la calidad del espacio que desde la arquitectura proponemos como lugares de vida colectiva. [3]

Sitios públicos con obras cinéticas más importantes de caracas, según Claudio Antonio Ramírez Soto

En la ciudad de Caracas, Venezuela, el cinetismo urbano ha sido utilizado para embellecer y dar vida a los espacios públicos. En este artículo, exploraremos algunos de los ejemplos más destacados de cinetismo urbano en el espacio público caraqueño.

La Plaza Venezuela
La Plaza Venezuela es uno de los lugares más icónicos de Caracas, y es el hogar de varias obras de arte cinético. Una de las obras más destacadas es la escultura «Cúpula de la Luz», creada por el artista Jesús Soto. La escultura está hecha de tubos de acero y plástico, y se ilumina por la noche, creando un efecto impresionante.

Fuente: https://www.pinterest.com/pin/630222541587541755/

El Parque Los Caobos
El Parque Los Caobos es un espacio verde popular en el centro de Caracas, y es el hogar de varias obras de arte cinético. Una de las obras más destacadas es la escultura «Espacio de Transparencias», creada por el artista Carlos Cruz-Diez. La escultura consiste en varias columnas de colores que cambian de tonalidad según la ubicación del observador.

Fuente: https://noticias24venezuela.net/2019/07/28/muere-los-95-anos-artista-carlos-cruz-diez/

La Avenida Bolívar
La Avenida Bolívar es una de las principales arterias viales de Caracas, y es el hogar de varias obras de arte cinético. Una de las obras más destacadas es la escultura «El Reloj de la Tortuga», creada por el artista Francisco Narváez. La escultura es una gran tortuga de bronce que tiene un reloj en el centro de su caparazón.


Claudio Ramirez dice que el cinetismo urbano:

es una forma de arte que ha transformado el espacio público caraqueño. La Plaza Venezuela, el Parque Los Caobos y la Avenida Bolívar son solo algunos ejemplos de cómo el arte cinético puede embellecer y dar vida a los espacios públicos. Estas obras de arte no solo son impresionantes visualmente, sino que también son una muestra del talento y la creatividad de los artistas venezolanos.

Referencias:

«Cinetismo Urbano en Caracas.» La Patilla, 11 Octubre 2018.

«El cinetismo urbano, una tendencia artística que se instala en Caracas.» El Nacional, 28 Abril 2017.

«Jesús Soto: La obra de un maestro en la Plaza Venezuela.» El Universal, 11 Julio 2017.

«Carlos Cruz-Diez: Una obra que desafía el tiempo.» El Nacional, 7 Octubre 2019.

«El Reloj de la Tortuga, una obra que muestra el ingenio venezolano.» El Nacional, 25 Junio 2019.

Claudio Antonio Ramírez Soto es un ingeniero civil egresado de la Universidad Católica Andrés Bello en Caracas, Venezuela, en 1995. [4] También tiene una maestría en Ingeniería de Construcción y Gerencia de proyectos de la Universidad de Texas en Austin, Texas, EE. UU., obtenida en 1999.[5] Actualmente es el director general (CEO) de Pilperca, [6] una empresa que se dedica a la construcción civil y obras públicas. La empresa ha trabajado en proyectos como la construcción del Centro Comercial Ciudad Tamanaco y el Hotel Renaissance Caracas La Castellana. [7]

Claudio Antonio: Percepción + estética en el arte cinético

La estática dentro del arte lo podemos definir como el análisis de la naturaleza y la belleza por parte de las personas, las cuales pueden estar estrechamente relacionados con las artes. Asimismo el nombre de “estética” también deriva del latín moderno aestheticus, y también del griego aisthētikós que significa “percepción o sensibilidad” a través de los sentidos.

Entonces, cuando una persona valora una obra de arte como “bella” o “sublime” el crítico de este debe estar guiado para clasificarla según lo que representa, y esto se puede lograr utilizando sus conocimientos sobre el arte y emitir su juicio estético. A su vez, el concepto de estética ha evolucionado con el tiempo y se han dividido en varias corrientes, algunas de ellas pueden ser los siguientes:

  • La estética clásica: Fue un concepto desarrollado durante la Antigua Grecia, en especial cuando estaban los romanos. Allí se desarrolló el fundamento de las nociones futuras de lo bello en Occidente. Para ellos, lo bello, lo bueno y lo verdadero eran una sola cosa, y su naturaleza tenía que ver con la mesura, la armonía, la justicia y la adecuación al ideal de una época.
  • La estética medieval: Este tipo de corriente nació durante el Medioevo, donde fue una época mayoritariamente religiosa en Occidente, en la que el pensamiento cristiano imperó por encima de los demás. Así, el concepto de belleza tenía que ver con los valores fundamentales cristianos: la fe en Dios, el sacrificio, la pasión y la pureza, o sea, con la moral más que con las apariencias.
  • La estética moderna: Se desarrolló durante el Renacimiento, cuando se rompió con la tradición cristiana y reivindicó lo clásico en el marco de las ideas del humanismo y la Ilustración, para quienes pensaban a la razón como un concepto central. Las ideas de belleza de la época se atribuían a lo planificado, lo estructurado, lo simétrico y lo armónico. Se pensaba a la belleza a partir de la perfección y el orden, sin dar espacio a la extravagancia o la desproporción.
Claudio Antonio - Percepción -estética en el arte cinético

Bajo este concepto, el arte cinético también se levanta y a su vez crea una percepción de la estética según el color, forma de la estructura y armonía, que juntos hacen un espectáculo para la vista de las personas.

Entre las características propias de la estética, el arte cinético abarca varias que permiten que pueda entrar en armonía, algunas de ellas son las siguientes:

  • Cualidades sensoriales: El arte cinético permite que las personas que lo observen tengan una experiencia sensorial, ya que el artista puede hacer que un objeto sea agradable a los sentidos (por ejemplo, su textura, sus colores, su brillo o su timbre).

Además, estas cualidades se perciben mediante los sentidos y, según quién las experimente, varía el placer que producen. Por ejemplo, si una obra cinética permite que la persona pueda atravesarla, entonces garantiza una experiencia sónica y táctil.

  • Cualidades formales: Esto se encuentra conformado por el modo en que en el objeto se combinan los elementos que lo componen, o la relación que puede percibirse entre ellos. Por ejemplo, dentro del arte cinético se conforma por formas y colores, si estos unidos tienen armonía entonces puede tener este tipo de cualidades.
  • Cualidades vitales: Refieren al contenido existencial o vivencial de un objeto, es decir, a las ideas que evoca, a los sentimientos que transmite o a las vivencias que recupera. Un ejemplo de ello, es cuando los artistas reflejan parte de su historia o experiencias en cada obra.
Claudio Antonio - Percepción -estética en el arte cinético

Claudio Antonio: Julio Le Parc expone sus más de 60 años de trayectoria en Uruguay

Uno de los mejores exponentes argentinos del arte cinético, Julio Le Parc expuso recientemente sus más de 60 años de trayectoria en Uruguay, haciendo una propuesta al estilo Quintaesencia, que consiste en un juego para adentrarse en un mundo de formas, colores y luces, cosa que es completamente recurrente y característico de este tipo de representación artística.

Al respecto, el portal web de noticias “Memo” de Argentina, compartió la siguiente información, sobre este excelente artista latinoamericano.

El mendocino de 94 años ha sido elogiado por los críticos como uno de los más importantes de su generación. Su obra centrada en el op art y en el arte cinético lo ha convertido en una figura importante dentro del arte moderno argentino.

«Mi trabajo iba a la búsqueda de un espectador diferente, no al habitual del museo», le contó Le Parc a El País. «Que viviera una experiencia directa sin pasar por los filtros o las exigencias de que el espectador tiene que estar cultivado, con cierto nivel estético, una sensibilidad desarrollada. Lo mío trataba de ser lo más directo posible de manera que cualquier persona podía ser cómplice mío y participante de la experiencia».

Despojado de las clasificaciones, Le Parc asegura que no le importa tener un estilo marcado. «Si ven mis obras pueden pensar que son de artistas distintos. Nunca me preocupó tener una imagen de marca o un estilo».

Apunta a que sus obras con formas y colores simples entablen una relación con la gente.

«No solo señalarle injusticias, sino hacerla sentir bien. Si la gente sale de la exposición con un pequeñísimo optimismo aumentado para mí es haber ganado», asegura.

«Para mí lo importante transcurre en despertar un optimismo en la gente. Y crear un pequeño mecanismo que encuentre su solución sola. El optimismo, en definitiva, es un motor para transformar las cosas», agrega.

Claudio Antonio - Julio Le Parc expone sus más de 60 años de trayectoria en Uruguay

Artista en potencia

Julio Le Parc es actualmente una de las figuras más reconocidas en el campo de la investigación y las artes visuales experimentales centradas en el op-art moderno y el arte cinético, donde su influencia se ha extendido desde mediados del siglo XX hasta la actualidad.

Este argentino comenzó sus estudios en la Escuela Nacional de Bellas Artes de Argentina, donde inició su interés por las relaciones entre luz y forma. Luego de esto, Le Parc se adentró en el entorno radical de los movimientos estudiantiles de su país natal, entre 1955 y 1958 fue partícipe de las ocupaciones en la Academia de Bellas Artes y en las reformulaciones de sus planes de estudio, orientándose por las propuestas de artistas de vanguardia como el movimiento Arte-Concreto-Invención y donde conoció al influyente crítico de arte Jorge Romero Brest.

Posteriormente, para el año de 1958 viajó a París tras recibir una beca del Servicio Cultural Francés, donde conoció a artistas como Victor Vasarely y otros importantes representantes del arte cinético.

De este artista, Le Parc extrae no solo sus propuestas formales en cuanto al movimiento, sino también sus implicaciones políticas, como una forma de articular experiencias estéticas sin la necesidad de conocimientos previos o familiarización alguna con el mundo del arte.

Esta gran influencia artista sin duda repercutió en la obra del argentino y tales implicaciones se derivan de las prácticas colectivas del Groupe de Recherche d’Art Visuel (GRAV), del cual fue miembro fundador; guiado por un rechazo de la posición del arte en el capitalismo. El colectivo enfatizaba la anonimidad y la participación de los espectadores a través de la aplicación de técnicas industriales, mecánicas y cinéticas por igual.

Posteriormente, participó en el Atelier Populaire de Francia durante mayo de 1968 y en diversas publicaciones radicales de vanguardia, afianzando su producción, siempre cercana al cinetismo, en un compromiso social y político que concibe a los espectadores ya no solo como participantes en la obra, sino como co-autores.

Claudio Antonio - Julio Le Parc expone sus más de 60 años de trayectoria en Uruguay

La estética dentro del arte cinético

Cuando estudiamos la belleza de la naturaleza de las obras de arte e involucramos el análisis de la perspectiva a la cual el pintor realizó su trabajo y lo que quería transmitir a través de cada trazo, estructura y simbolismo, podemos indicar que estamos apreciando la estética de la obra (y esto dentro del arte es sumamente valioso).

La estática la podemos definir como el análisis de la naturaleza y la belleza por parte de los individuos, los cuales pueden estar estrechamente relacionado con las artes. Su nombre deriva del latín moderno aestheticus, y también del griego aisthētikós que significa “percepción o sensibilidad” a través de los sentidos.

Cuando se valora una obra de arte como “bella” o “sublime” el crítico debe utilizar sus conocimientos sobre el arte y emitir su juicio estético. A su vez, el concepto de estética ha evolucionado con el tiempo y se han dividido en varias corrientes, algunas de ellas pueden ser los siguientes:

  • La estética clásica: Fue un concepto desarrollado durante la Antigua Grecia, en especial cuando estaban los romanos. Allí se desarrolló el fundamento de las nociones futuras de lo bello en Occidente. Para ellos, lo bello, lo bueno y lo verdadero eran una sola cosa, y su naturaleza tenía que ver con la mesura, la armonía, la justicia y la adecuación al ideal de una época.
  • La estética medieval: Este tipo de corriente nació durante el Medioevo, donde fue una época mayoritariamente religiosa en Occidente, en la que el pensamiento cristiano imperó por encima de los demás. Así, el concepto de belleza tenía que ver con los valores fundamentales cristianos: la fe en Dios, el sacrificio, la pasión y la pureza, o sea, con la moral más que con las apariencias.
  • La estética moderna: Se desarrolló durante el Renacimiento, cuando se rompió con la tradición cristiana y reivindicó lo clásico en el marco de las ideas del humanismo y la Ilustración, para quienes pensaban a la razón como un concepto central. Las ideas de belleza de la época se atribuían a lo planificado, lo estructurado, lo simétrico y lo armónico. Se pensaba a la belleza a partir de la perfección y el orden, sin dar espacio a la extravagancia o la desproporción.
La estética dentro del arte cinético - Claudio Antonio

Bajo este concepto, el arte cinético también se levanta y a su vez crea una percepción de la estética según el color, forma de la estructura y armonía, que juntos hacen un espectáculo para la vista de las personas.

Entre las características propias de la estética, el arte cinético abarca varias que permiten que pueda entrar en armonía, algunas de ellas son las siguientes:

  • Cualidades sensoriales: El arte cinético permite que las personas que lo observen tengan una experiencia sensorial, ya que el artista puede hacer que un objeto sea agradable a los sentidos (por ejemplo, su textura, sus colores, su brillo o su timbre).

Además, estas cualidades se perciben mediante los sentidos y, según quién las experimente, varía el placer que producen. Por ejemplo, si una obra cinética permite que la persona pueda atravesarla, entonces garantiza una experiencia sónica y táctil.

  • Cualidades formales: Esto se encuentra conformado por el modo en que en el objeto se combinan los elementos que lo componen, o la relación que puede percibirse entre ellos. Por ejemplo, dentro del arte cinético se conforma por formas y colores, si estos unidos tienen armonía entonces puede tener este tipo de cualidades.
La estética dentro del arte cinético - Claudio Antonio
  • Cualidades vitales: Refieren al contenido existencial o vivencial de un objeto, es decir, a las ideas que evoca, a los sentimientos que transmite o a las vivencias que recupera. Un ejemplo de ello, es cuando los artistas reflejan parte de su historia o experiencias en cada obra.

Elías Crespín: Nueva era del arte cinético

Muchos son los artistas latinoamericanos que se han destacado dentro del arte cinético. Carlos Cruz Diez, Jesús Rafael Soto, Alejandro Otero, entre otros, han abierto paso con el tiempo a la generación de relevo dentro de este estilo de arte, dando la pauta en cuanto a color, movimiento y creatividad. Entre los exponentes de esta nueva generación se encuentra Elías Crespín.

Este artista venezolano empezó a escucharse desde el 2020, cuando el 25 de enero presentó una obra de arte cinético es ahora parte de la colección permanente del Museo del Louvre, dando así mucho de qué hablar.

Es considerado el primer artista latinoamericano en tener una obra en este museo y lo más resaltante es que sus obras se han desarrollado principalmente en el exterior, aunque al inicio de su carrera expuso en algunas galerías y museos del país.

Este artista nació en el año de 1965 en Caracas (Venezuela), y estudió ingeniería informática. Aunque usted no lo crea, por sus venas corre sangre artística ya que es nieto de Gego y Gerd Leufert, además de ser hijo de matemáticos, cosa que le agrega un plus significativo dentro de su arte.

Elías Crespín-Nueva era del arte cinético -Claudio Antonio

Durante su desarrollo artístico pudo tener contacto con artistas, amigos de sus abuelos, y haber atestiguado sus procesos creativos deben haberlo impactado de alguna manera. Su primera obra fue Malla Electrocinética I (2004), la cual le tomó dos años de trabajo. Conjugar sus dos universos de pertenencia, el arte y la informática, han hecho que produzca obras que en esencia son una reflexión matemática sobre el movimiento.

En el 2018, Crespin fue comisionado por el Museo del Louvre, para el cual desarrolló “L’Onde du Midi” (2020), una escultura móvil a gran escala en la cual 128 cilindros de metal penden de cables de nailon conectados a motores programados que generan movimiento de manera algorítmica.

Las ondulaciones y transformaciones de la pieza crean una coreografía cuyo motivo son las líneas y planos de la arquitectura del museo, materializando la abstracción de las continuidades formales entre la obra y el espacio. La investigación de Crespin concierne al tiempo, la forma y el movimiento; no como elementos cinéticos atados a la estética, sino como elementos matemáticos vinculados al análisis y a la programación.

Sus obras han sido expuestas en varias exposiciones internacionales individuales y colectivas entre las que destacan, la Exposición Internacional en Astana; la XIII Bienal de Cuenca; la Bienal de Busan Corea en; el Grand Palais; la Maison de l’Amérique Latine; el Musée de la Musique de París; el Musee de Louvre; la Fondation Boghossian; la Verrière Hermès de Bruselas; The Museum of Fine Arts, Houston (MFAH); y el Ullens center for contemporary art en Beijing.

La obra

L’Onde du Midi pertenece a la categoría de «Plano Flexionante», está formada por 128 tubos cilíndricos alineados paralelamente, suspendidos en el aire por hilos transparentes, que constituyen un plano horizontal rectangular de casi diez metros de largo (1,50 x 9,50 m) cuando está en reposo. Al accionarse en el espacio, alcanza una amplitud de 3 a 4,50 metros de alto, al ritmo de secuencias establecidas mediante algoritmos numéricos.

Esto sin duda representa una especie de “coreografía ondulatoria”, en donde la linealidad mecánica está ausente, privilegia la lentitud y favorece la contemplación. Frente a ella, el espectador se ve sumergido en una danza lenta y grácil de formas infinitas e impredecibles.

Su configuración espacial es aleatoria y nos sorprende continuamente, a través de formas que se expanden, aplanan y difractan; pasando del orden al caos, de lo simple a lo complejo. Asimismo, la escalera meridional se transforma así en el escenario de un silencioso ballet, brindando al visitante un alto en el camino y una vista espectacular. 

Elías Crespín-Nueva era del arte cinético -Claudio Antonio

Todo sobre el arte contemporáneo

Formas, luces, movimiento, ilusión y experiencia sensorial es parte de lo que involucra el desempeño del arte contemporáneo en el mundo, puesto a que la misma abarca las formas de arte dentro de nuestra era, las cuales son producidas e interpretadas como un reflejo de la sociedad actual a partir del siglo XX.

Aunque creamos que el arte contemporáneo es fácil de entender, este se trata de un concepto difícil de acotar y cuyos límites varían enormemente dependiendo de a quién se le consulte, a punto tal que para muchos no existe realmente una distinción entre arte moderno y arte contemporáneo y esto se basa principalmente en su raíz.

Para algunos estudiosos del arte,  lo moderno es propio del siglo XIX y primera mitad del XX, dejando lo contemporáneo para finales del XX e inicios del XXI. Pero no existe consenso al respecto, pues en el fondo se trata de delimitaciones estéticas y no cronológicas.

Todo sobre el arte contemporáneo - Claudio Antonio

El arte contemporáneo, entonces, se podría definir dentro de una línea de tiempo de mediados y finales del siglo XIX por los ciertos rasgos estéticos y ciertas preocupaciones filosóficas de su momento. Por eso algunos prefieren incluso utilizar el término “postmoderno” para referirse a lo estrictamente contemporáneo.

En todo caso, el arte contemporáneo es una categoría amplia y complicada que engloba las manifestaciones artísticas y los estilos artísticos más recientes de la humanidad, y es propio de la sociedad industrial y postindustrial (o digital).

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Entre sus características resaltan las siguientes:

  • La experimentación y lo nuevo son un valor en sí mismo, sobre todo en lo que a nuevas técnicas y nuevos materiales se refiere, lo cual incluye hacia finales del siglo XX la aparición del arte digital y el aprovechamiento de las nuevas tecnologías.
  • Se resignifican muchos de los elementos centrales de la tradición artística, a menudo de manera irónica.
  • Se abandona lo figurativo y se abraza la abstracción, la figura geométrica, la línea y el caos como métodos expresivos posibles.
  • La reflexión sobre la naturaleza del arte y del artista es constante, y eso abarca también los espacios de legitimación como museos, instituciones, etc.
  • Se cruzan las fronteras entre géneros, apuntando a un arte híbrido, mestizo, indeterminado.

El arte cinético entra en este tipo de corriente, ya que aporta renovación, modernismo y elementos que pueden ser centrales como tradicionales.

Recordemos que el arte cinético es un movimiento artístico el cuál se desarrolló por primera vez en 1920, y que consiste en que las obras tienen algún movimiento o parecen tenerlo, por lo que suelen interactuar con elementos en el “exteriores” como pueden ser el viento o el agua; algunos tipos de motores; e incluso la luz o el electromagnetismo.

Dentro de esta corriente artística se puede a su vez clasificar en tres tipos de estructuras que se observan dentro del arte cinético, como lo son:

  • Los estables: este tipo de obras tienen un carácter fijo, lo que permite que el espectador pueda rodear la obra y percibir en diferentes ángulos el movimiento.
  • Los móviles: por su parte, las obras móviles producen un movimiento real, y por tanto van cambiando su estructura constantemente. Siendo «heraclitianos», a cada instante nace una obra distinta.
  • Los penetrables: Son obras son ensamblajes en espacios reales y el espectador debe recorrerlas, penetrar en ellas, siendo el espectador el productor de movimiento.

Entre las características del arte cinético se basa en la búsqueda de movimiento, pero también en la mayoría de las obras el movimiento es real, no virtual. Para realizar la obra el artista se plantea y sigue una estructura rigurosamente planificada.

Por lo general, los materiales utilizados para realizar obras cinéticas deben ser fáciles de manipular, de cambiar su forma y que aporten dinamismo. Los más comunes son el acero, el metal o la madera, y son accionadas mediante mecanismos impulsados por agua o por alguna fuerza motriz.

Todo sobre el arte contemporáneo - Claudio Antonio